CHARRÚA enamora y apasiona. Amor por la carne. Carne con nombre propio. Carne con mayúsculas en un espacio donde todo gira alrededor de la parrilla. Esencia. Calidad. Producto. Sabores de los mejores cortes. Aires uruguayos para disfrutar de unos bocados buscados con mucho mimo. Un ritual donde todo se fundamenta en la tradición y en la magia. Fuego. Parrilla. Carne. Tres puntos de apoyo imprescindibles para que cada detalle tenga sentido. CHARRÚA sabe a excelencia. No hay motivo para la distracción. Una parrilla espectacular da sentido a todo el local. Marca los tiempos. Impone una personalidad que sabe seducir a cada comensal. En la parrilla se vive cada segundo con intensidad. Desde allí se provoca el entusiasmo de todos. La carne deslumbra en su punto. Es suprema.

 

UNA HISTORIA DE PASIÓN POR LA CARNE

CHARRÚA es pura pasión por el producto, por la mejor carne. Una gran parrilla preside la sala convirtiéndose en el centro gastronómico del espacio. CHARRÚA es el proyecto personal de Ignacio Juanvelz y Rodrigo Marchal. Ignacio es uruguayo, Rodrigo es valenciano de nacimiento. Los dos llevan muchos años en Galicia. Amigos y socios. Hace 10 años «pusimos en marcha CHARRÚA en A Coruña. Un espacio pequeño, acogedor, donde la parrilla es la clave. Fue una apuesta por la buena carne en un entorno donde el pescado y el marisco es esencial en la cocina. Por eso apostamos por ella, en una tierra en la que también hay un excelente producto como es la Vaca Rubia Gallega. Después vino Cannibal que es otra propuesta orientada al raw-bar. Cuando teníamos asentados los dos proyectos en Galicia decidimos dar el salto a Madrid. Por esas cosas de la vida pudimos aterrizar en el local del mítico Café Óliver, y decidimos poner en marcha primero Cannibal en otoño del 2016. Ahora justo enfrente hemos arrancado con CHARRÚA. Llevamos desde marzo. Y nuestra propuesta es el producto. Con humildad, trabajo y dedicación ofrecemos la mejores carnes posibles a nuestros clientes».

 

LA MAGIA DEL FUEGO

CHARRÚA es un espacio acogedor y luminoso. Recuerda al salón de una estancia de campo uruguaya, donde la parrilla es el centro de todas las miradas. Allí el parrillero con maestría, dedicación y excelente oficio va preparando los diferentes cortes de carne que van saliendo hacia las mesas. Para los más pasionales una barra preparada -también para comer- nos sitúa junto a una parrilla que es marca de la casa. Nos cuenta Ignacio que CHARRÚA lo ha decorado él mismo. «Tiene mucho carácter uruguayo. Hemos respetado algunos elementos del local que nos dan personalidad como las columnas o las vigas. Las maderas nos han llegado desde Toronto, no tienen tratamiento. Están como nos llegaron». En CHARRÚA se apuesta por las esencias: el fuego y la carne. Y efectivamente todas las miradas giran hacia la parrilla y el fuego: «El fuego es mágico. Transmite muchas cosas. Es un forma ancestral de cocinar, y que se siga manteniendo tal cual para la elaboración de la comida es espectacular. Mantener esa forma de cocinar cargada de prehistoria y de tradición con el fuego directamente es muy bonito. Me siento muy orgulloso de Uruguay, donde siempre se cocina con el fuego. En cualquier casa, en cualquier restaurante, en cualquier boliche -que son nuestros bares- siempre hay una parrilla. Y esa forma de entender la cocina es la que queremos transmitir en CHARRÚA». Por eso la parrilla es la clave: «Nos gusta trabajar de forma tradicional. Se manipula el producto lo menos posible. Buen producto, buena leña, buen parrillero y a la mesa. Sin salsas. Servimos el chimichurri casero al comienzo, pero recomendamos que las carnes se tomen solas. Sin desvirtuar el sabor y la intensidad». En este sentido, en la parrilla «sólo utilizamos leña de encina que es muy natural y sarmiento que es lo que da el toque ahumado muy interesante».

 

LA MEJOR CARNE COMO IDENTIDAD

La carta de CHARRÚA es una auténtica delicia carnívora. «Nos identifica la carne. La mejor carne como seña de identidad». Un recorrido por Uruguay, Argentina, Australia, Alemania, Holanda, Estados Unidos y desde luego la Ternera Rubia Gallega. Propuestas deliciosas como «el entrecot de novillo; el bife chorizo de novillo o el lomo de novillo. La picaña Black Angus o el lomo alto Black Angus. Sin olvidarnos del lomo Simmental o un Tomahawk. Hay que anotar el steak tartare de Vaca Rubia Gallega, el asado de tira Black Angus o el chuletón de Vaca Rubia Gallega con 40 días de maduración. Y también es muy especial la cabeza de Black Angus de Arkansas».  En los entrantes hay brasas con sugerencias como «el chorizo criollo, la morcilla, las mollejas o el provolone. Una gran propuesta de verduras siempre a la plancha con tomate, cebolla, pimientos, calabacines, alcachofas o espárragos en temporada. Y algo tan uruguayo como es el boniato».  La carnes tienen sus acompañamientos como «las patatas fritas o el puré de patatas siempre elaborado todo por nosotros». Y quién quiera un entrante más fresco en verano encuentra «cuatro ensaladas que cuidamos mucho». En los postres una carta amplia, repleta de autenticidad: «Volcán de dulce de leche. Panqueques de dulce de leche. Lemon pie. Fresas silvestres gallegas. Tarta de queso. Sugerimos siempre un final dulce que marca la tradición como una forma perfecta para terminar una comida de buena carne a la brasa». Preguntamos por algunas de las sugerencias preferidas: «Gustan mucho todas, pero sí tengo que decir alguna concreta -sin duda- son la entraña, las mollejas, el espárrago a la brasa en temporada y el lomo alto de Nebraska». En CHARRÚA la bodega se mima con primor. «Rodrigo es un gran experto y su mano se nota. Lo cierto es que somos amantes del vino. Nos gusta tener una buena propuesta de las diferentes Denominaciones de Origen españolas. Y también tenemos vinos argentinos, chilenos, uruguayos, franceses, portugueses o de Nueva Zelanda. Buscamos calidad, proponemos etiquetas que armonicen bien con nuestra propuesta gastronómica». 

 

UN GRAN PARRILLERO

En CHARRÚA todo es importante. Pero algo es imprescindible: el parrillero. «Para nosotros el parrillero es esencial. Parece fácil, pero es muy difícil. Con nosotros está Adrián, lleva diez años. Comenzó en A Coruña y ahora está entre los dos locales. Es muy duro trabajar constantemente a muy alta temperatura y haciendo muchas cosas a la vez. Carnes. Entrantes. Verduras. Él solo con 70 comensales en sala. Y todo sale en su punto. Como decimos nosotros: ¡Todo lo saca de taquitos! Tiene mucha mano. Tiene paciencia y calidad. No trabaja con termómetro. Y además es muy humilde. Es un parrillero grande y lo hace con naturalidad». En CHARRÚA en definitiva se trabaja con pasión y humildad. «Siempre queremos aprender, hacer mejor las cosas. Con sencillez y con dedicación». No se deja nada a la improvisación. Por ejemplo «no doblamos las mesas. Nos gusta que cada comensal no tenga prisa y pueda disfrutar de cada corte de carne, de cada plato». CHARRÚA es el verdadero paraíso para los amantes de la carne. Se vive con dedicación. Se trabaja con calidad. Se disfruta con plenitud.

 

GALERÍA

 

 

Fotografía de Borja Gómez

CHARRÚA

C/Conde de Xiquena nº4

28004 MADRID

Phone: 912791601

Horario: M-D 13:30 a 16:00/ M-S 20:30 a 0:00/ Lunes cerrado

Precio medio: 50 euros

www.charruamadrid.com

 

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