Entrar en FÁBRICA MARAVILLAS es sentir plenamente. Es descubrir la fuerza de la creatividad. Es asombrarse ante la sinceridad de lo artesano. Estamos ante una cerveza que ha llegado para quedarse. Tocar la malta y oler el lúpulo es posible en este espacio que se ha convertido ya en un imprescindible en el centro de Madrid. Este laboratorio artesanal y  cervecero elabora 5.000 litros al mes. Pasión por la cerveza, corazón y mucho coraje han situado este Brewpub en el top ten de Europa. FÁBRICA MARAVILLAS ha creado estilo y tendencia en Madrid.

 

CULTO A LA CERVEZA ARTESANAL

El amor se siente, se palpa e inunda cada uno de los rincones de FÁBRICA MARAVILLAS. Es un amor con mayúsculas. Un amor incondicional por la cerveza artesanal. Pasión por el lúpulo. Por el aroma. Estefanía y Tamara Pintado lo tuvieron claro cuando llegaron a Madrid: esta ciudad se merecía una cerveza artesanal. Y se la dieron. “Abrimos en 2012 y desde entonces no hemos parado hasta crear riqueza local en Malasaña, nuestro barrio. Es un oficio que hemos ido aprendiendo. Sabíamos que podíamos hacerlo y lo hicimos. Ahora producimos 5.000 litros de cerveza artesanal al mes. Todo un reto para nuestro equipo”. El maestro cervecero es el marido de Estefanía, Thierry Hascoet. Un autodidacta apasionado de esta bebida. “Empezamos elaborando nuestras propias cervezas en casa. Han sido muchas horas de dedicación al producto con mucho mimo. Recuerdo que comprábamos el cereal en grano y cocinábamos en la colla de cocido. Así aprendimos a elaborarla”. Entrar por la mañana en FÁBRICA MARAVILLAS significa adentrarse en un laboratorio muy especial que permite asistir a cada fase del proceso de creación. La puerta cerrada contrasta con el movimiento frenético que hay en el interior. “Aunque parezca increíble en estos 180 metros cuadrados elaboramos, embarrilamos y embotellamos nuestras cervezas. Y lo hacemos con ingredientes de alta calidad, cuidando cada uno de los procesos de fabricación. No pasteurizamos, no añadimos conservantes y respetamos los tiempos de fermentación. Es nuestra metodología. La que nos lleva a conseguir un producto artesano lleno de sabor y aroma sin ingredientes de origen animal”. Este proceso tiene algo de magia: “Todo comienza con el diseño de la receta del maestro cervecero. Es él quien determina el estilo, maltas, grado de alcohol, de amargor, el aroma o el color. Después llega la selección en el almacén del cereal. Y a partir de aquí nacen nuestras cervezas que envasamos nosotros mismos. Desde hace unos meses, también transferimos la bebida directamente al tanque. Hemos cumplido nuestro sueño y en septiembre de 2016 compramos dos tanques de servida de 1.000 litros, por lo que pasa al grifo directamente”. Para saber cuando está lista, solo hay que pinchar el barril, servir y saborearla con pasión.

 

MALASAÑA Y VALVERDE. LAS FAVORITAS

Entrar en este local y escuchar en la barra: “¡Una MALASAÑA!” se ha convertido en todo un ritual. “Es nuestra American Pale Ale. Sin duda, la más popular. Una rubia muy aromática, afrutada y con un puntito amargo. Muchos de nuestros clientes dicen que sabe a flores, y se lo debe al lúpulo que le otorga ese sabor afrutado. Es sorprendente y engancha desde el primer sorbo». Nos cuentan que otra de las imprescindibles es “nuestra CABRONA, a la que llamamos así porque tiene una cuádruple fermentación que le otorga una graduación de 11 grados. Esta cerveza de estilo belga con higos secos y vainilla en rama es otra de las favoritas”. Tampoco puede faltar en esta cata la VALVERDE, “que debe su nombre a la calle donde está situada esta mini fábrica. Una cerveza de sabor suave. La ofrecemos a los que nunca han tomado una artesanal y quieren familiarizarse con ella”. Y desde luego no podía faltar la IPA, «la nuestra es rubia, intensa y con mucho lúpulo que le otorga un amargor especial. Nosotros la llamamos FLIPA porque nos encanta la mezcla de los suaves toques cítricos con los maltas”.  En todo caso, en FÁBRICA MARAVILLAS siempre están buscando posibilidades nuevas, cervezas de temporada y propuestas intersantes.Sabores muy peculiares que se pueden maridar con una selección de quesos y embutidos ibéricos así como conservas de alta calidad. Las tapas vienen acompañadas de un delicioso pan de hogaza que sale del bagazo de su propia cerveza: “Desde 2015 trabajamos con la panadería PANIC. ¡Hacen unos panes maravillosos! Ellos vienen y recogen una parte de nuestro bagazo y a cambio nos mandan estas delicias que se pueden saborear en nuestra barra con un buen embutido. Por supuesto, ibérico”. Además, los viernes a la hora del aperitivo este templo de la cerveza se convierte en un punto de encuentro muy madrileño. “Hemos empezado con Los Viernes Castizos. A partir de las 12.30 ofrecemos tapas muy de la tierra junto a nuestras cervezas. Se trata de una colaboración con el bar La Jauría, también situado en Malasaña”.

 

LA PASIÓN POR LA CERVEZA ARTESANAL

FÁBRICA MARAVILLAS habla muchos idiomas. “Aquí se lleva el turismo de cerveza. El 50% de nuestra clientela es extranjera. A veces vienes un día y somos los únicos que hablamos español. Incluso hay turistas que han venido directamente desde el aeropuerto a degustar una cerveza de la casa. Como no distribuimos por el momento, muchos nos visitan para disfrutarla in situ». En el único Brewpub del centro de Madrid se mezclan los turistas con los clientes del barrio. “Todas las tribus urbanas que te puedas imaginar se reúnen en este espacio. Es muy habitual encontrar aquí a los que nunca han tomado cerveza artesanal codo con codo con los cerveceros más frikis, compartiendo a su vez una MALASAÑA junto a un grupo de turistas que charlan animadamente con esos dos extranjeros que viven en Madrid y son unos enamorados de la cerveza artesanal”. Este ambiente es producto de la función pedagógica que ha asumido en este tiempo FÁBRICA MARAVILLAS. “Cuando abrimos no existían fábricas de cerveza. Es interesante porque 2012, momento en el que empezamos, se consideró el año cero para la cerveza artesanal en España. Hemos asistido a esa revolución. Somos testigos y tenemos que añadir con humildad que incluso nos convertimos en actores principales. Ese año arrancaron en nuestro país 42 fábricas de cerveza, entre ellas la nuestra. En 2014, 300 emprendían una nueva andadura”. Aquí el culto a la cerveza se transmite más allá de la barra. “Programamos visitas guiadas los jueves que tienen una gran acogida entre los amantes cerveceros. En esta ruta pueden conocer las instalaciones. Contamos en detalle el proceso de elaboración. Hablamos de materias primas, envasados, etc. Este recorrido culmina con una degustación libre de varios estilos de nuestra cerveza”.

 

UN PROYECTO POR ENCIMA DE LAS MODAS

FÁBRICA MARAVILLAS rompe con el estilo tradicional de una cervecería al uso. Ladrillo visto. Mesas altas. Líneas rectas y el color blanco impregnado en cada rincón dan a este espacio un aire muy singular. “La decoración es trabajo de Tamara Pintado. Ella lleva la imagen de marca. Anteriormente trabajaba como diseñadora de interiores. Desde el primer momento llamó mucho la atención nuestra imagen y el diseño del local. Tradicionalmente los sitios de cerveza eran de madera y muy oscuros. FÁBRICA MARAVILLAS quería ir más allá. Dar otra visión. Y creo que lo hemos logrado». Tanto es así que hasta cuentan con un jardín vertical en la zona de degustación. “Este coqueto espacio nos lleva a la idea del lúpulo. Lo ha creado un diseñador del barrio que trabaja el paisajismo de interior: MON AMOUR”. Una creación muy exclusiva que atrae todas las miradas. También el muro de los deseos, que se ha convertido en un reclamo para los más soñadores. El ambiente va in crescendo desde primera hora de la tarde. “Aquí hay mucha rotación. Si llegas y no hay sitio, hazte un hueco y espera solo un poco. En seguida encontrarás un rincón para disfrutar de una caña, media o pinta. Mientras tanto puedes ver cómo fabricamos la cerveza». Sin duda, FÁBRICA MARAVILLAS es otra forma de entender el producto. “Defendemos que es más que una moda. Estamos ante una bebida que sienta bien porque es natural, sin conservantes ni aditivos y cuyo olor y aroma son realmente atractivos al olfato y al paladar”. Imposible resistirse. Como tampoco se han resistido fuera de nuestras fronteras. “En 2013, el prestigioso The Guardian publicó un ranking de los 10 mejores Brewpub de Europa y ahí estábamos nosotros”. En el barrio de Malasaña la revolución cervecera es ya un hecho. La craft beer ha venido para quedarse con un aroma único. Inconfundible. De la mano de dos mujeres que derrochan tanta personalidad como sus cervezas. Junto al maestro cervecero han convertido este pequeño rincón de Madrid en todo un templo de “la bebida de los Dioses”.

 

GALERÍA

 

Fotografía de Borja Gómez

FÁBRICA MARAVILLAS

Calle Valverde nº29

28004 MADRID

Phone: 915218753

Horario: abre todos los días a partir de las 18 horas. V-D desde mediodía.

Visitas guiadas: 15 euros

www.fmaravillas.com

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