En ROOSTIQ se habla y se escucha el brillante lenguaje gastronómico del fuego. Alrededor de él se construye un proyecto donde la cocina es quién marca las pautas. El fuego es ese elemento de la Naturaleza que sabe elevar la mejor materia prima a la excelencia. Y -precisamente- el fuego es el protagonista de ROOSTIQ donde la armonía con el producto de finca hacen que lleguen a la mesa excelentes elaboraciones. En ellas la sencillez, el sabor, la calidad y la honestidad son parte indispensable. En ROOSTIQ, marca el ritmo una espectacular cocina a la vista donde el fuego en distintas versiones van dando sabor y sentido a la carta. Propuestas conectadas directamente con la naturaleza y con un producto orgánico y sabroso. Cocinando siempre al ritmo del fuego.

 

EXCELENTE COCINA DE FINCA

ROOSTIQ acaba de aterrizar en el Barrio de Chueca y lo ha hecho con todos los honores. Un proyecto basado en la calidad del producto y en una cocina donde todo está orientado al sabor y al disfrute. ROOSTIQ es una ilusión familiar que se ha hecho realidad. Hablamos con Alberto Álvarez -impulsor de la idea- que cuida con mimo cada detalle con toda su familia. «Tenemos una finca familiar en Ávila, concretamente en Palazuelos. Allí son 150 hectáreas, desde donde siempre hemos cultivado hortalizas -rúcula, acelgas, lechugas baby, cebolletas- y hemos criado pollos de corral y cerdos de bellota. Era normal en nuestra familia que con nuestros productos agasajáramos a nuestros amigos cuando acudían allí. Siempre gustaba mucho. Nuestros invitados nos sugerían que teníamos que montar algo para compartir con todos nuestros productos de finca. Y así se encendió el chispazo, que poco a poco ha tomado forma: un restaurante de finca». Es decir, un espacio en el centro de Madrid donde se pueda disfrutar de todo el producto de la finca propia. Materia prima de primera. Agricultura ecológica. Animales criados en libertad y con una alimentación natural. «Nuestra finca es la estrella de ROOSTIQ. Como es lógico completamos la oferta siempre con un producto de excelencia de otras partes de España con lo que no tenemos en la finca, como por ejemplo con la carne de ternera que nos la traen desde el País Vasco». Y es que efectivamente entrar en ROOSTIQ es cruzar la puerta de un espacio familiar y acogedor, agradable y especial donde la cocina vista preside la sala. Un ambiente delicioso para degustar una gastronomía de esencias, sin caretas ni aliños.

 

EL PODER DEL FUEGO

ROOSTIQ es la exaltación máxima del fuego. «Nos parece que es el elemento que respeta al producto, que potencia el sabor y que sabe resaltar lo mejor de cada plato. El fuego y las brasas forman parte de nuestra esencia. De nuestra manera de entender nuestra propuesta». Precisamente basando todo en el sumo respeto a esos productos «hemos apostado por la cocina a fuego con tres posibilidades: Fuego de leña en su horno napolitano, donde elaboramos las pizzas napolitanas pero también otras sugerencias como arroces y pescados. Fuego de carbón en la parrilla donde se preparan las carnes. Y desde luego el fuego directo pensado para recetas como pueden ser las acelgas».  En ROOSTIQ nos cuentan: «Nos mueve la pasión. Pasión que ponemos en nuestro campo de Palazuelos para criar a nuestros animales en libertad. Y pasión no solo por la cocina, sino por el placer de dar de comer. Compartir alrededor de una mesa. Es esta pasión la que no nos permite caer en la conformidad y nos empuja a mejorar día a día». En este sentido, encontramos en la cocina la mano joven y ya experimentada de Carmen Acero que «sabe a la perfección manejar los fuegos, las brasas y las llamas para eleborar de forma artesana cada una de las propuestas». Sabiduría y juventud con resultados fabulosos en una cocina honesta y marcada por lo mejor de la temporada.

 

SABORES CON PERSONALIDAD

La carta de ROOSTIQ es una sabrosa propuesta donde el producto se escribe con nombre y apellidos. En los entrantes por ejemplo hay que anotar «los embutidos de nuestra finca, que se presentan en una tabla con propuestas como el salchichón ibérico de bellota o la paletilla ibérica de bellota». Los quesos también tienen nombre propio: «Es la tabla de quesos de cabra de Elvira García. Concretamente : Barraqueño, Luna Nueva, Canto Lavado y Canto de Gredos». Precisamente entre los entrantes encontramos una de las estrellas de la carta. Un imprescindible: «Torreznos de verdad servidos con champagne, que se ha convertido en un fijo en todas las mesas. Sorprenden por su sabor y por su personalidad. Es nuestro concepto por cambiar las reglas del juego. Son la Bella y la Bestia». Además también «otra de las propuestas llegadas directamente de nuestra finca son las acelgas elaboradas a la llama que siempre sorprenden por la calidad del producto y por su sabor». Hablando de platos principales nos situamos primero en el Horno Napolitano donde se cocina a 485º. «De allí salen platos tan deliciosos como el arroz integral salteado con verduras o el lomo de salmón con cebolleta, soja, vinagre balsámico y tomates cherry. Además de unos deliciosos pimientos de Julia». Y desde luego uno de las grandes protagonistas de ROOSTIQ. «El ya famoso POLLO ROOSTIQ, criado en libertad en nuestra finca. Esta cocinado a la brasa, con una salsa de tomate especial y con un toque final en el horno de leña que hace que tenga una jugosidad especial y diferente. Es un plato que está encantando por su sabor, y también por su presentación cercana y sorprendente».  Y así llegamos al horno de leña, una auténtica joya de la cocina. «Un lugar donde preparamos las espinacas baby y rúcola a la brasa que se acompaña con vinagreta de bacon y huevo frito. Y por supuesto nuestros entrecot y chuletón de vaca, la picanha que gusta muchísimo y una hamburguesa de buey que está siendo un éxito». Y desde luego no nos olvidamos de las pizzas, una buena propuesta preparadas en su punto en el Horno Napolitano que por cierto“ha venido desde Italia. Se ha construido ladrillo a ladrillo. Todos los materiales son originales de Italia».  En este terreno, nos sugieren posibilidades como «el calzone de torreznos; la pizza de enchilada de carne o la de pimientos rojos a la brasa y anchoas que es una delicia». Y en los postres, recetas artesanas muy bien pensadas para que sean el cierre perfecto para una buena comida o cena en ROOSTIQ: «Bizcocho casero de queso y chocolate con avellanas. Brownie de chocolate Valhrona, tahin y Halwacon helado de caramelo a la sal o la tarta de manzana artesana con crema inglesa son buenos ejemplos de ello». La bodega en ROOSTIQ está muy cuidada. Unas 80 referencias interesantes y bien elegidas. Atención muy especial a todas las Denominaciones de Origen. Buenas sugerencias de champagne e interesantes propuestas de los vinos del Marco de Jerez.

 

CAUTIVADOR Y CERCANO

ROOSTIQ cautiva desde el primer momento. La arquitecta e interiorista Maria Villalón ha sido la encargada de hacer que este espacio sepa conjugar a la perfección un equilibrio impecable entre lo cool y lo cosmopolita, entre lo rústico y lo cercano. Siempre con un mensaje: «Filosofía de respeto al producto y pasión por la cocina a fuego del restaurante». Y es que como nos explica ella misma:  “A la hora de realizar el diseño observamos que todos los procesos y caminos hasta alcanzar el producto nacen de un núcleo y se van desarrollando, evolucionando y combinando hasta llegar al estado final. De ésta manera, se toma como punto de partida el núcleo de la tierra y las diferentes capas que lo envuelven hasta llegar a la superficie”. Una propuesta que nos conduce desde los azules que nos reciben en la barra hasta los rojos y calderas que marcan el territorio de la cocina a la vista donde el fuego marca el carácter de ROOSTIQ. Honestidad y producto. Sabor y personalidad. Disfrutar por encima de todo.

 

GALERÍA

 

Fotografía cedida por ROOSTIQ

ROOSTIQ

C/ Augusto Figueroa, 47

28004 MADRID

Phone: 918532434

Precio medio: 30 euros

Horario: M-X 13:00 a 1:00/ J. 13:00 a 2:00/ V-S 13:00 a 2:30/ D. 13:00 a 17:00

www.roostiqmadrid.com

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