TABERNA PEDRAZA. Una calidad que emociona

Un año ha sido suficiente. Un año ha bastado para que TABERNA PEDRAZA se convierta en un lugar obligado y obligatorio en la gastronomía madrileña. Un año que se cumplía la pasada primavera y que se ha visto refrendado de la mejor manera posible en este mes de noviembre abriendo el nuevo local a pocos metros del anterior y que convierte a este tramo de la calle Ibiza de Madrid en un punto de alta calidad culinaria.

UNA GRAN COCINA HONESTA Y CON PASIÓN

El nacimiento de TABERNA PEDRAZA fue tan bonito como audaz. Nunca es fácil embarcarse en una aventura sin conocer el resultado final. La fórmula era sencilla y, por lo tanto, con muchas papeletas para el éxito: materia prima de primera categoría, cocina de siempre con cariño, cuidado máximo en los detalles. Dicho así, suena todo muy bien; pero todos sabemos que eso no es suficiente. En TABERNA PEDRAZA, lo han hecho posible Carmen Carro y Santiago Pedraza. Ellos son los que han dado forma y fondo a este proyecto que se ha convertido en el Madrid gastronómico en un sitio clave y en una apuesta de largo recorrido. “Una cocina honesta. Con pasión. Poniendo mucho cuidado por hacer las cosas bien”.

LO MEJOR DE CADA CASA

Los avatares de la vida situaron a Carmen en el lugar que siempre había soñado: delante de unos fogones. Unos largos meses aprendiendo lo mejor de cada sitio, convirtieron a esta mujer en una auténtica doctora de la tortilla de Betanzos, de los huevos fritos, de las croquetas de jamón, de la ensaladilla rusa, del pisto manchego o de la quesada pasiega. Lo mejor de cada casa. Cocinado con fidelidad a los orígenes y condimentado con un mimo extremo. Por eso, desde el primer momento TABERNA PEDRAZA ha tenido ese “no se qué” que la han posicionado en lo que ahora mismo es: parada necesaria en el mundo gastro madrileño.

DIEZ EN REGULARIDAD

Mientras Carmen se encierra en la cocina, Santiago es el gran director de orquesta. No hace ruido. Igual está en la barra sirviendo un vino, que atiende personalmente a unos comensales. Santiago, tuvo la idea y Santiago la ha puesto en marcha. Su cabeza perfectamente ordenada, ha sabido ir midiendo los pasos para convertir esta taberna en lo que es y en lo que será. Santiago cuida uno a uno a los proveedores, estudia una y otra vez la carta que va retocando, viaja con frecuencia para conocer nuevas aportaciones y además atiende personalmente a cada persona que cruza el dintel de TABERNA PEDRAZA en busca de ese plato del que le han hablado y que no quiere dejar pasar la oportunidad de probar. “Lo que más me halaga es que digan que hacemos una cocina que tiene un diez en regularidad. Eso es lo más complicado”.

LA CLAVE DEL BOCA A BOCA

Y es que, en este primer año y medio, han recorrido un trayecto del cero al infinito. El “boca a boca” ha funcionado como nunca y hoy en Madrid es conocida como si llevaran funcionando mucho tiempo. Un año les ha servido para ser ya un imprescindible de la capital.

¡QUE GRAN LOCAL!

Tan intensos han sido estos primeros meses que TABERNA PEDRAZA acaba de inaugurar nuevo local a pocos metros del inicial, un nuevo escenario mucho más amplio por dentro y por fuera. Una sala grande con más de cincuenta comensales, con una barra confortable y con una zona de mesas altas también muy recomendable. La cocina espaciosa, donde se trabaja todo a la brasa, a excepción de la “mítica” tortilla de Betanzos. Una cocina que ha facilitado que se incorporen a la carta algunas novedades muy apetitosas de caza de los Montes de Toledo, excelentes verduras o algunos guisos de los que habrá que dar buena cuenta. Y es que además, en ese nuevo espacio, Carmen puede desplegar con más fuerza, si cabe, toda la maestría aprendida y demostrada.

¡Y AHORA TORTILLERIA!

Mención a parte se merece el nuevo rincón de “la tortillería” donde se van contando una a una el manjar emblema de la casa. La tortilla de Betanzos ha obtenido un éxito arrollador. Está cuidadosamente cocinada y se elabora pesando cada huevo, que deben de tener de 48 a 50 gramos; y que están siempre frescos con una vida máxima de 24 a 48 horas. Cada huevo se cuida. Cada tortilla está cocinada de forma nominal.

PERSONALIDAD Y CARACTER

La nueva TABERNA PEDRAZA, amplia y confortable, es idea y diseño de LAZARO ROSA-VIOLÁN. Con dos componentes clave, personalidad y carácter, mantiene las esencias de los inicios y permite, al mismo tiempo, disfrutar mucho más de la calidad indeleble de este lugar. El traslado ha sido un traslado enriquecedor. Se mantiene la carta con esas novedades mencionadas de caza, verduras y guisos, seguro que irán llegando otras muy pronto, y se mantienen las de siempre. Las ya comentadas y celebradas. La mayoría de edad ha sentado muy bien a TABERNA PEDRAZA. Más espacio, más amplitud, mayor oferta y la misma calidad de siempre.

“TODO TIENE QUE ESTAR SIEMPRE MUY BUENO”

En el fondo no ha cambiado nada. La fórmula sigue siendo la misma. “Nuestra cocina es comparable y, por eso, el reto es mayor. Todo tiene que estar muy bueno. Siempre muy bueno”. Carmen en la cocina cuidando todo para que cada croqueta, cada chistorra recién llegada de Lasarte o cada lata de sardinas en aceite aterrizado desde Oporto sigan siendo tan personales como siempre. Es una cocina donde se trabaja para cada persona, para cada cliente que tiene cara y ojos. Y, por supuesto, Santiago; en la sala pendiente de cada detalle, de todos y de todo. No se le escapa nada. Lo hace con mucho cariño, y lo hace disfrutando.

UNA COCINA DE EMOCIONES

TABERNA PEDRAZA siempre sorprende. “Es una cocina de emociones”. Lo ha hecho desde los inicios. Y lo sigue haciendo ahora. Cada vez que uno visita TABERNA PEDRAZA la sorpresa está asegurada. Y esas sorpresas siempre se superan. Siempre a mejor. Y manteniendo una calidad que es el sello de la casa. “Construyendo siempre el círculo perfecto”.