¿Por qué nos gustan tanto? Porque invitan a compartir. Porque son una reunión entre amigos. Porque incitan a las sobremesas más largas y divertidas. Porque son sinónimo de buen tiempo. Porque son al aire libre. Por el motivo que sea. Lo que tenemos claro es que disfrutar de una barbacoa es siempre un acierto. ¿Qué necesitamos para prepararla? Os lo contamos para que sea un día redondo.

 

UN ENCUENTRO ENTRE AMIGOS

Ahora que hemos dejado atrás el invierno, es momento de pensar en la primera barbacoa de la primavera. ¿Qué necesitamos para organizar un encuentro inolvidable al aire libre? Aunque parezca evidente, lo primero que necesitamos es una barbacoa. Si la del año pasado no te sirve, todavía estás a tiempo de comprar una barbacoa que se adapte a tus necesidades. Una vez que tengamos nuestra barbacoa a punto, llega el momento de decidir qué tipo de barbacoa queremos preparar. De carne o de pescado. Si optamos por la primera opción, podemos comprar chuletillas de cordero, longaniza, morcilla, chorizo, panceta, pinchitos, entraña o filetes de lomo.  Si hacemos la barbacoa de pescado, no podemos olvidarnos de las sardinas -siempre en los meses que llevan R-, la dorada o unos langostinos frescos. Ambas opciones son perfectas para una deliciosa barbacoa. Ya que estamos hablando de una comida bastante contundente acompañada con pan -sobre todo en la opción de carne-, siempre es bien recibida una guarnición ligera. Podemos echar a las brasas tomates, champiñones, pimientos, cebolla e incluso patatas. Nuestros comensales lo agradecerán y podrán seguir disfrutando de todo lo que hemos preparado.

 

DISFRUTANDO DESDE LAS PRIMERAS BRASAS

Y es que una barbacoa no es solo sentarse a comer. De hecho, muchas veces disfrutamos de este u otro bocado de pie. El encanto que esconde es que todo empieza mucho antes. Cuando encendemos las primeras brasas. Para ello es necesario carbón, pastillas y un mechero. Hay que tener en cuenta además dónde colocamos la barbacoa. Lo ideal, nos cuentan los cocineros, es que esté en un lugar donde haya una corriente de aire. Y mientras la lumbre va cogiendo forma, a los chefs del día les ofrecemos un aperitivo. Una buena opción: quesos o encurtidos. Evitaremos incluir embutidos si nuestra barbacoa es de carne. Si es de pescado, en este primer aperitivo, podemos incluir chorizo, salchichón, jamón y lomo ibérico. Siempre a gusto del comensal y según el presupuesto con el que contemos. En cuanto a la bebida, para que no se caliente, resulta muy útil llenar un cubo grande con hielos y echar las cervezas y el vino blanco. El tinto lo mantendremos fuera. Si tenemos tiempo, una bebida que apetece mucho en un día como este es la sangría. Solo tienes que cortar manzanas, naranjas, la piel de un limón y unos melocotones, canela y plátanos. Cuando tengamos toda la fruta picada, echamos el vino y un refresco de naranja o limón. Con un chorro de vermut, el resultado es espectacular. Llega la primavera. Llega el tiempo de las barbacoas. Es momento de disfrutar.

 

Fotografía de Ceviche de Sandía

Pin It on Pinterest