La cita gastronómica de REALE SEGUROS MADRID FUSIÓN 2018 nos ha dejado como siempre muchas cosas. Novedades. Aportaciones. Recetas. Evolución. Esencias y sabores. Pero con toda seguridad, la imagen de esta edición ha sido la presencia de JOAN ROCA y de su madre MONSERRAT FONTANÉ. Una presencia que vale más que mil palabras. Precisamente minutos antes de aparecer en el escenario del Congreso hemos podido charlar con ellos de forma distendida para CEVICHE DE SANDÍA. Sencillez. Ternura. Profesionalidad. Calidad humana. Personalidad. Raíces. ¡Una demostración rotunda para recordarnos donde está lo importante!
LA GRANDEZA DE LA SENCILLEZ
Faltan pocos minutos para aparecer en el gran salón de actos de REALE SEGUROS MADRID FUSIÓN 2018. Estamos en el backstage. Cocineros. Periodistas. Cámaras. Idas y venidas. Allí en el centro pero como abstraídos de todo y de todos reparamos en MONSERRAT FONTANÉ y en JOAN ROCA. Madre e hijo. Charlan y conversan con unos y con otros. Afables. Sencillos. Cercanos. En una armonía fascinante. Dos generaciones que han sabido evolucionar un proyecto que se inició en un pequeño bar de Girona y que se ha terminado convirtiendo en un gran restaurante. Reconocido -en repetidas ocasiones- como el mejor del mundo. De CAN ROCA al EL CELLER DE CAN ROCA. De la tradición al futuro. De las raíces a la creatividad. De los sabores de siempre a las sugerencias innovadoras. Le preguntamos a MONSERRAT sobre sus sentimientos en estos momentos. Tranquila. Sonriente nos dice: «Siento algo especial. Algo importante. Estoy muy orgullosa de mis hijos. Me han traído casi a la fuerza; pero ahora estoy muy contenta de estar aquí». Junto a ella, su hijo JOAN añade: «Por el momento no sabe muy bien que es lo que siente. Es la primera vez que le pasa, es la primera vez que cocinamos juntos». Precisamente a JOAN ROCA le preguntamos sobre las sensaciones que percibe cocinando en público con su madre: «Es un homenaje a ella -desde luego- y también a las madres de todos los cocineros. Todos sabemos que hemos llegado hasta aquí, a partir de lo que hemos aprendido en casa con nuestras madres. Y es que -a veces- viene bien pararse, reflexionar, mirar hacia adelante y poner el retrovisor para ver lo que hay detrás. Muchas de esas cosas siguen vigentes. Cada vez son más importantes. Tenemos que ser muy conscientes de que nos diferencia la autenticidad y esa autenticidad está basada en nuestras raíces, en nuestro origen». Minutos después salen al escenario del Palacio de Congreso Municipal de Madrid. Los dos elaboran una receta, la preferida de MONSERRAT: «Una sopa de hierbabuena. Una sopa sencilla elaborada con agua, pan, huevo, aceite, sal y hierbabuena. Es muy sabrosa y tiene un gran valor afectivo y familiar para nosotros». JOAN nos recuerda como cada día sus padres siguen trabajando en CAN ROCA, el bar de toda la vida donde se sirven unos doscientos menús al mediodía, entre otros, a todos los trabajadores de EL CELLER DE CAN ROCA. Antes del servicio acuden a comer los bocados deliciosos de siempre. JOAN sigue repasando recuerdos y escenas del espacio. «Mi madre es un buen ejemplo de que se puede alcanzar la felicidad cocinando cosas sencillas y, además, repitiéndolas muchas veces». Y es que EL CELLER DE CAN ROCA, un referente de innovación y apuesta gastronómica vive como decía JOAN mirando por el retrovisor. Es en definitiva, amor de madre y pasión de hijo.
Fotografía de CEVICHE DE SANDÍA
EL CELLER DE CAN ROCA
Carrer de Can Sunyer, 48,
17007 GIRONA
Phone: 972 22 21 57
Horario: M-S 13:00 a 0:00/ L-M cerrado