Entrar en SKULL ST. supone quedarse prendado de su barra con mayúsculas. Ella lo convierte en ese bareto al que siempre queremos volver. El chef Carlos Núñez se atreve con una cocina atrevida con raíces gallegas. No podía ser de otra manera. El mensaje, muy canalla, llega hasta el paladar. Lasaña de zamburiñas. Ensaladilla rusa. Baby ribs. Placeres para morder la vida como si fuera el último bocado. En SKULL ST. todo está pensado para el disfrute, para vivir la gastronomía con plenitud y con desenfado. Calidad y producto sin elocuencias innecesarias. Todo es esencia. Todo es sabor. Vibrar y disfrutar con propuestas que gustan romper moldes y que están muy buenas. La sorpresa equilibrada sabe mucho mejor. Y ahora en verano la terraza complementa el proyecto con todos los resortes. Siempre hay un hueco para sacar a ese gamberro que llevamos dentro.
LA COCINA ESTÁ HECHA PARA SENTIRLA
Sobre SKULL ST., no se escribe. SKULL ST., se vive. Se siente. Este espacio canalla nos trae una cocina muy atrevida. El chef Carlos Núñez apuesta por un bar de toda la vida con mucho rollo. “Es un local para la gente que cree que la vida no está hecha para ir con cuidado. Esa filosofía se traslada a la cocina a la vista de donde salen los platos creados en el momento”. La cocina de SKULL ST. se reinventa cada día. “Es parte de nuestra esencia. En cuatro meses hemos dado la vuelta dos veces a la carta. Es una oferta gastronómica muy cambiante. El objetivo es que cada vez que vengas te encuentres algo diferente. Stop al aburrimiento. Esa podría ser nuestra carta de presentación”. SKULL no solo significa calavera. “SKULL es streetfood y cocina muy nuestra. Significa una especial atención siempre en la materia prima. Y significa relajase. Disfrutar con cada plato que sale de esa cocina que nunca se detiene”.
RECIÉN SALIDOS DE UNA TABLA PERIÓDICA
El producto manda. Y la originalidad también. “Una tabla periódica gigante colgada en la pared presenta estos platos para compartir. Comida de siempre y a la vez diferente con unas raíces gallegas muy auténticas. Esto no se explica. Se prueba y se disfruta”. Na. Ca. Bo. Pa. Cr. No son los últimos elementos químicos descubiertos. Es el corazón de la cocina de Carlos. “Naam de papada glaseada sobre pan de chile y ensalada fresca de apionabo. Bocadillo de calamares con mahonesa de lima. Ensaladilla rusa con polvo de mojama y patata roja gallega. Alcachofas a la brasa con velo ibérico. O las patatas bravas… bravas. Sugerencias para compartir en la barra o en una de esas mesas altas”. Y si de sorprender se trata, “recomendamos probar nuestra lasaña de zamburiñas y gambas fritas con pasta fina gratinada al horno. Y cómo no, los baby ribs con salsa de pimienta negra y miel. También la costilla de ternera glaseada con BBQ japo y naranja. Para comer con las manos y chuparse los dedos”. La cocina de SKULL ST. es una locura muy sana. “La calidad para nosotros es una de las máximas. Le otorgamos un gran valor al origen. La costilla de ternera viene de Galicia. Son 700 gramos de carne de primera elaborada durante 36 horas a 55 grados y glaseada con una salsa barbacoa japonesa. No es necesario un cuchillo para partirla”. También el steak tartar presume de producto. “Cocinado con jalapeño sobre coca crujiente, la carne es ternera blanca gallega. Aquí no se contempla trabajar con un producto que no sea de máxima calidad. Ese es nuestro secreto mejor guardado”.
QUESO DE CUEVA PARA EL POSTRE ESTRELLA
Y así llegamos a los postres. Con el queso azul que toma forma en las cuevas asturianas se elabora la tarta de queso. “El Gamonéu es un producto 100% artesano. Su auténtico sabor transmitido de padres a hijos llena de matices uno de nuestros postres más demandados. Una textura que contrasta con el maracuyá. También recomendamos la piña caramelizada con ron sobre crema pastelera y helado de coco”. La coctelería de Javier Moro suma en este espacio con las paredes forradas de contenedores traídos del puerto de Valencia. “Hemos creado el RED SKULL con zumo de frutas tropicales con amaretto y tequila. Es el trago de la casa. Los presentamos en una calavera de cristal. Está inspirado en la vida del local y podríamos definirlo como un cóctel muy fresco y canalla. Los que lo prueban siempre repiten”. En la barra, una cerveza de barril bien fría y vinos seleccionados con mucha dedicación. “Reivindicamos las D.O. españolas: Ribera del Duero, Rioja, Madrid, Castilla y León, La Mancha, Rueda o Albariño. También contamos con vinos espumosos italianos, símbolo de calidad. Hay que sentarse en la barra solo, y observar cómo preparan las croquetas de sepia y gamba mientras nos dejamos llevar por las sugerencias de la casa”.
EL EQUIPO CALAVERA
Y es que el equipo de SKULL ST. es otra de las fórmulas de su éxito. “Cuando entras en este local te das cuenta de que es un sitio con mucho rollo. Y eso se lo da el grupo de personas que entendemos SKULL ST. como nuestra gran pasión. Algo que se nota en la empatía que se crea con el cliente”. Es este un espacio de contrastes. Punto de encuentro con el Madrid más canalla. “SKULL ST. tiene el encanto de esas barras de antaño donde se compartían conversaciones y más de una cerveza. El sabor de esa limonada natural con uno de esos platos clásicos y algo diferentes. Queremos que sea un sitio que sorprenda y sobre todo que divierta”. Y ahora en verano con la terraza en plena Plaza del Rey se imbuye todo en una magia siempre diferente. SKULL ST. es en definitiva un espacio donde fluctúan los elementos. Donde el buen rollo no se explica. Simplemente se disfruta. Un lugar con mucha química.
GALERÍA
Fotografía de Borja Gómez
SKULL ST.
Barquillo nº8.
28004 MADRID
Phone: 911 734 346
Horario: D-M. 12:30 a 01:00/ J- S 12:30 a 02:00
Ticket medio: 25 euros.