SUNNE es frescor, es juventud, es ilusión. Es una de las más recientes novedades de la calle Santa Teresa, convertida en un dinámico enclave gastronómico junto a la Plaza de Alonso Martínez. Allí encontramos la fuerza y la personalidad de un joven cocinero -Paulino Bernabé- que con trabajo, sentido común y muy buen producto está haciendo cosas muy interesantes. SUNNE nos muestra la importancia de la audacia gastronómica. Todo está medido y pensado: entorno muy cuidado, calidez en la decoración, cocina incorporada a la sala y una atención muy cercana. Aires nórdicos, cocina viajera, producto de aquí. Una propuesta a tres bandas con resultados sabrosos y sorprendentes. Una carta con sugerencias novedosas y arriesgadas. Siempre encontrando un buen equilibrio de sabor y técnica.  

 

UN PROYECTO CON ILUSIÓN Y SENTIDO COMÚN

SUNNE representa a la perfección la fuerza de la ilusión, las ganas de hacer bien las cosas, la pasión por una cocina donde el producto es la única razón de ser, la alegría de la juventud. «Un proyecto en el que nos embarcamos hace dos meses. Y en el que ofrecemos una cocina singular, que transmita tranquilidad, que ofrezca sabor y que tenga aires de fusión con claras raíces de aquí». Charlamos con Paulino Bernabé -impulsor y chef de SUNNE– desprende seguridad, coherencia y personalidad. Un cocinero joven y dispuesto a hacer muy bien las cosas con los pies en el suelo. «Después de mis estudios de cocina, he trabajado en distintos lugares. El último antes de emprender este proyecto fue en Lúbora. Tenía muy claro que quería poner en marcha algo personal. Por eso, en cuanto surgió esta posibilidad me pareció que era el momento». Paulino se muestra tranquilo, muy seguro de un proyecto donde todo está madurado. Se respira un ambiente muy armónico en SUNNE. Donde la fusión y la tradición se reparten a partes iguales el protagonismo de los diferentes papeles. «No queremos modas en la cocina, queremos ir a nuestro ritmo, haciendo las cosas bien, tranquilamente. Poner bien las bases».

 

EXCELENTE PRODUCTO PARA RECETAS ARMÓNICAS

En SUNNE se disfruta de una cocina sabrosa, con espíritu viajero y de fusión siempre con productos de primera calidad. Es una de las reglas de oro que maneja Paulino en la cocina. «Solo buscamos producto de excelencia. No escatimamos nada. No hemos planteado este proyecto como algo para ganar dinero. Sólo buscamos el disfrute de cada cliente. Por ejemplo, el atún es de Baltfegó o la carne es de La Finca. Son claros ejemplos de que lo que queremos es lo mejor de lo mejor». El día a día es imprescindible para Paulino. «Me gusta mucho ir al mercado. Siempre con la posibilidad de incorporar cosas nuevas. Nuestra carta tiene movimiento. Es ágil, está pensada para que siempre pueda surgir una sorpresa, una sugerencia nueva. Una propuesta que cambia en función de la temporada. Y para que nuestros clientes puedan venir con frecuencia; y encuentren sabores y recetas novedosas». En SUNNE se respira una atmósfera que atrapa. Cocina vista, ambiente acogedor, una barra que recibe al comensal. Luminosidad. Todo pensado. Todo muy agradable. Un servicio cercano, agradable y personal.

 

CADA PLATO ES UN MUNDO DIFERENTE

La carta de SUNNE -sinceramente- sorprende. Una aparente sencillez que hace que cada plato se convierta en un trayecto interesante hacia sabores y contrastes diferentes. En apariencia todo es normal, en el fondo cada propuesta está elaborada en un punto adecuado y perfecto. Se juega con la audacia de la sorpresa en una cocina bien elaborada. Una carta en la que encontramos algunos platos intocables «como el ceviche de dorada al maracuyá; el arroz Kubak con plancton o la lasaña de rabo de toro». Otras sugerencias muy sabrosas como «el cangrejo crujiente de concha blanda; la ensalada de pato crujiente; las vieiras con crema de coliflor o las siempre diferentes ancas de rana». Otras recomendaciones también obligadas son «el pez mantequilla con crudités de verdura; el atún rojo al ponzu de trufa; las albóndigas de buey o la presa ibérica con crema de Piquillos». En los postres -todos elaborados en SUNNE– hay una gran estrella: «Lingote de chocolate a las frutas rojas que lleva una cobertura de chocolate muy fina, con una mousse de frutas del bosque, galleta María y gel de arándanos y petazetas». La bodega de SUNNE mantiene la misma esencia: «Una carta dinámica y equilibrada. Bodegas nuevas con propuestas interesantes y etiquetas clásicas que gustan a todos. Tenemos desde un 30.000 Maravedíes de la D.O. Madrid a un Luis Cañas de la D.O.Rioja. Nos gusta tener propuestas diferentes para todos los gustos. Y como en la cocina la carta es también ágil». Además siempre se ofrece un Menú del Día «con un plato consistente y bien elaborado, pensado para degustarlo y volver bien a trabajar». Una posibilidad siempre interesante.

 

AIRES NÓRDICOS Y ACOGEDORES

El nombre de SUNNE sugiere, provoca y excita la curiosidad. «Es el nombre de una localidad situada en el centro de Suecia, donde mi familia tiene una casa. Es un ambiente precioso, tranquilo, sereno. Verde en verano, blanco en invierno. Transmite serenidad. Por eso SUNNE lo hemos decorado recordando a una de esas míticas cabañas nórdicas. Todo de madera. Todo lo hemos hecho nosotros. Cada pieza encaja de forma artesanal. La decoración también es nuestra».  Y es que Paulino nos cuenta que «mi padre tiene un taller artesano de fabricación de guitarras. Precisamente la madera sobrante, la hemos utilizado para la decoración de SUNNE. Las paredes de madera, las mesas, los colores nos conducen a esas cabañas que transmiten luz, color y mucha serenidad». SUNNE tiene alma, se respira expectación ante una gran experiencia donde el sabor y el producto cautivan desde el primer momento.

 

GALERÍA

 

 

Fotografía cedida por SUNNE

SUNNE

C/ Santa Teresa nº2

28004 MADRID

Phone:  916 22 59 15

Horario: M-J 12:00 a 1:00/ V. 12:00 a 2:30/ S. 12:00 a 0:00/ D-L Cerrado

Precio medio: 25 euros/ Menú diario: 11.50 euros

www.sunne.makro.rest

 

 

 

Pin It on Pinterest